Usos correctos de la coma (I)

Usos correctos de la coma (I)


     Durante los casi veintidós años de esta columna se han abordado los casos en los que más se incurre en impropiedades. En muchas ocasiones ha sido necesario volver sobre un tema y darle otro enfoque, con el deseo de procurar un mejor uso de este signo, que es de los más importantes, pues le da sentido a la escritura. He perdido la cuenta de las veces que he dedicado series de artículos basados en el uso de la coma, y aunque es justo reconocer que a la luz de lo que he aportado en esta columna y en talleres sobre ortografía y redacción que me ha correspondido dictar, ha habido unas algunas mejoras; pero todavía quedan rezagos, sobre todo en las redes sociales, en las que abundan los escritos carentes de sentido (verdaderos disparates), que solo por adivinación pudiera uno saber lo que su autores  quisieran expresar. Lo cuestionable es que son personas que deberían manejar el asunto con relativa facilidad, habida cuenta de su formación profesional universitaria. De paso, se molestan cuando alguien les hace una corrección. 
     Basado en el criterio de la Fundación para el  Español Urgente (Fundéu), los usos más comunes de la coma son: en frases explicativas, adjetivos explicativos pospuestos al sustantivo u oraciones adjetivas; complementos de nombre explicativos; comentario, explicación o precisión a algo dicho; enumeraciones, vocativos, omisión del verbo, con marcadores de discurso, cláusulas absolutas; apodos, alias, seudónimos y ambigüedades. En donde quizás más ocurren fallas, es en las enumeraciones y en el vocativo, tal vez porque muchos no se han preocupado por saber qué es este último.
     Se debe usar coma cuando en medio de la oración se inserta una frase que explica algo (frases explicativas): “Gustav Eiffel, creador de la famosa torre de París, también construyó un puente en Oporto (Portugal); “Don Miguel de Cervantes, el escritor de El Quijote, es considerado por muchos el creador de la novela moderna”.  Los adjetivos explicativos pospuestos al sustantivo u oraciones adjetivas también se separan con coma: “Las víctimas, furiosas, protestaron contra el gobierno”; “Las víctimas, que estaban furiosas, protestaron contra el gobierno”. Se omite el uso de la coma cuando el adjetivo o la subordinada cumplen función especificativa: “Las víctimas furiosas protestaron contra el gobierno”; “Las víctimas que estaban furiosas protestaron contra el gobierno”. La diferencia entre una y otra oración, es que en la primera todas la víctimas estaban furiosas; en tanto que en la segunda, pudo haber algunas que no lo estuvieran; pero no se habla de ellas, sino solo de las que sí lo estaban.
     Se usa la coma con complementos del nombre explicativos: “El alumno, de origen catalán, mostró una interesante visión sobre el nacionalismo”. En este caso, ya se sabe de qué alumno se está hablando y se explica que es de origen catalán. En cambio en: “El alumno de origen catalán mostró una interesante visión sobre el nacionalismo”. En este ejemplo se puede estar hablando de varios alumnos, por lo que se precisa que, entre todos ellos, nos referimos específicamente al de origen catalán.
     Para darle sentido a lo que se quiera explicar, debe escribirse: “Todos los trabajadores, excepto los del sindicato, fueron readmitidos” (comentario, explicación o precisión a algo dicho).
     También en las enumeraciones se debe saber  utilizar la coma, y  aunque es algo sencillo de asimilar y que se aprende en primaria, muchos son los errores que se cometen. Se escribe coma entre los términos, simples o compuestos, de una enumeración, excepto los unidos por conjunción: “Todos vinieron a la fiesta: “Pedro, Juan, María, César y Cristina”. Se considera incorrecto colocar una coma seguida de una conjunción: “Todos vinieron a la fiesta: “Pedro, Juan, María, César, y Cristina”. Pero existe una excepción, y es que si la conjunción precede a un miembro de la enumeración que se aparta de la secuencia de los otros, sí se escribe coma: “Los invitados trajeron la bebida, los pasapalos, la música, y el hielo lo trajimos nosotros”.
     Como habrán podido ver, es absolutamente falso que antes de la conjunción “y” no pueda ir una coma. Solo hay que saber usarla y punto.
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